Por: Andrés Felipe Múnera C.
Politólogo
(Foto: Las2orillas, 2020.)
Arturo Char, miembro del clan Char que ha tenido una excelente imagen debido a su gestión en Barranquilla, el Atlántico y la dirigencia del Junior, será a partir del 20 de julio el presidente del Senado de la República en el tercer año de la presente legislatura.
Su gestión será trascendental y estará vinculada a la elección del Procurador General de la Nación para los próximos cuatro años. Este puesto del ministerio público vital en la política colombiana ha despertado el interés de muchos candidatos, pero será el Senado quien a fin de año elija el reemplazo de Fernando Carrillo.
El gobierno espera que sea elegido una persona cercana a Duque, la oposición que sea un proceso limpio y que se enmarque en una elección justa para bien de todo el país. Hay que tener claro que una de las funciones de procurador y hacer vigilancia de los funcionarios públicos y el respeto de la ley y la constitución política.
Es un puesto clave y por ello desde ya se escuchan muchos nombres, aunque no hay ninguno fijo, varias fuerzas políticas quieren quedarse con la procuraduría con miras a las elecciones de 2022.
Margarita Cabello ministra de justicia, Luis Felipe Henao ex ministro de vivienda, Gregorio Eljach secretario del Senado, José Andrés O´meara director de Colombia Compra Eficiente son los cuatro nombres que más han sonado en los medios de comunicación, pero al final el lobby de los candidatos de la Corte Suprema, el Consejo de Estado y el del presidente será finalmente el elegido para el periodo 2021-2024.
Duque al llegar a la presidencia se convirtió en un amigo muy cercano del clan Char, por eso es fundamental que Arturo Char se convierta en presidente en un periodo clave para el presidente y en donde el mandatario deberá reorganizar la agenda y su visión a 2022 después del coletazo que la pandemia del Covid-19 le ha dado a su gobierno. La gestión del presidente ha sido muy deficiente, pero la llegada de personas cercanas a puestos claves le puede ayudar a salvar su gestión y al partido de gobierno que ve poco a poco como sus posibilidades de continuar en el poder por otros cuatro años se van esfumando.
La tercera legislatura es vital para el gobierno. En el Senado se elige Procurador, en la Cámara se elige defensor del pueblo y además se deben postular nuevos magistrados para las altas cortes, es decir todo está destinado a que Duque pueda tener una buena gestión en el final de su periodo presidencial, pero los escándalos aun no lo dejan en paz y estos lo pueden llevar a un fracaso político y gubernamental, un fracaso que se asoma poco a poco cada vez que miembros de su gobierno o del partido no logran evadir preguntas sobre las polémicas de la financiación de la campaña.
Amanecerá y veremos, pero por lo pronto las denuncias de Aída Merlano no han surtido efecto y Arturo Char será presidente del Senado tal cual como fue el acuerdo en 2018 entre el clan Char y Vargas Lleras hoy distanciado políticamente de la familia más popular de la costa caribe. Esto además de polémico dejará al congreso con una imagen mucho más debilitada de la que ya tienen y la corrupción sigue reinando.
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